martes, 12 de febrero de 2008

Crónica de un floricidio (o cómo contar una historia con sólo dos elementos)






Poco antes de las 7 de la tarde, Rosa fue apresada y encarcelada en la Torre de la Desesperación.

















Dos temibles guardias custodiaban su marcha a través aquellos lúgubres pasillos, que parecían no tener fín.















En la soledad de su celda, deseaba mantener una luz de esperanza...













...pero al alba del dia siguiente, fué conducida al paredón













Finalmente, entre tristes lamentos y sangre derramada, la vida de Rosa se fue apagando, con la mirada impasible de su verdugo como único testigo de su muerte.


7 comentarios:

Anónimo dijo...

Pfff cada día estás peor..empiezas a preocuparme, me suena ese escenario, jeje

interpreta-sones dijo...

es genial!! me ha encantado (vivalaimaginación)

La Miss dijo...

que mal rollo me ha dado... aunque he de reconocer que ha quedado guapo.

Corleone dijo...

Estás como Juana, la mujer de Felipe...

Bueno, al menos decirte que es original, ¡jejejeje!

Unknown dijo...

Hola, muy buena, la historia del floricidio. Aqui dejo mi huella, de mi blog cinéfilo, por si os queréis dar un volteo.

Saludos y suerte!!

Unknown dijo...

Mirándolo bien, esta historia, contada a través de unas velas, daría para un corto y quedaría bastante original. Una historia gótica y subrealista. Estudialo porque tiene posibilidades la cosa. Lo malo es que habría que comprar muchas velas, porqu los actores se derritirían rápido...

Un abrazo.

Oliver de la Rosa dijo...

Me ha gustado